Situada a 19 kilómetros de Atienza, la laguna de Somolinos es un enclave natural que hará las delicias de niños y mayores. Está situada junto al pueblo del mismo nombre y recibe sus aguas del río Bornova, que nace un kilómetro más arriba y cuyo "Manadero" es igualmente digno de ser visitado.
Los coches pueden dejarse junto a la caseta que guarda los contenedores de basura, e iniciar la marcha hacia el nacimiento del río Bornova siguiendo un camino con un indicador que dice "Manadero". Entre álamos gigantescos y rocas con formas caprichosas aparece del subsuelo una surgencia que es el nacimiento del Bornova. La mayoría de las personas no habrán visto algo parecido en su vida. Es muy gratificante y aleccionador contemplar como el agua sale del mismo suelo.
Nacimiento del río Bornova
De vuelta por el mismo camino que nos llevó al "Manadero" nos dirigiremos ahora hacia la laguna, llegando en primer término a un merendero fabricado todo él en pizarra y que será el lugar que elegiremos para comer una vez realizado el recorrido semicircular de la laguna. También dispone de una fuente. Lo que no podemos asegurar es que esté en perfecto estado de uso. El gamberrismo también asola estos lugares apartados.
El tiempo empleado en el recorrido no será más de 40 minutos. En los aledaños de la pequeña ruta se han colocado varios paneles explicativos del origen de la laguna, su fauna y su flora autóctonas, que ayudarán a que los niños aprendan sobre la naturaleza y harán el recorrido más ameno.
Niños en los alrededores de la laguna
Es un destino fantástico para hacer en primavera, verano e inicio del otoño, ya que estaremos en las tierras altas de Castilla.